Las personas con diversidad funcional, como discapacidad intelectual o enfermedades mentales, han podido participar por primera vez en los asuntos públicos.

Las personas con diversidad funcional, como discapacidad intelectual o enfermedades mentales, han podido participar por primera vez en cuestiones públicas. Pero hay que añadir que este proyecto va mucho más allá de la validación de textos con metodología de lectura fácil. Gobierno fácil también: - Incorpora las opiniones que normalmente vuelan bajo el radar de las instituciones - Genera espacios seguros de participación y empoderamiento para estas personas, donde pueden expresar sus opiniones, preocupaciones y expectativas - Elimina barreras y facilita el acceso a la información y la participación. Escuchamos una frase que resume la ilusión por el proyecto de uno de los jóvenes a la salida de uno de los talleres: "nunca me había pasado esto, nunca me había sentido protagonista". Actualmente, se han celebrado casi 20 talleres en los que han participado más de 100 personas con discapacidad. La asistencia a estos talleres supone un impacto en la vida de cada una de estas personas, pero la incidencia va mucho más allá. Las aportaciones que han realizado a las políticas públicas trabajadas en las sesiones pueden afectar positivamente a las más de 100.000 personas con discapacidad que viven en Aragón, así como a su entorno, familiares, cuidadores, y también a inmigrantes, mayores o personas con poca comprensión lectora. Además de los planes de acción y las leyes, también se han adaptado a lectura fácil numerosas sentencias de reconocimiento de discapacidad, formularios de matriculación escolar, guías y folletos de consumo y justicia y libros clásicos. Gobierno Fácil tiene un efecto multiplicador interno y externo. Por un lado, otros departamentos del Gobierno de Aragón comienzan a adaptar sus textos y formularios a la lectura fácil. Por otro, más Comunidades Autónomas también han comenzado a trabajar en ello, como Castilla y León. Pero el proyecto es perfectamente replicable también en cualquier tipo de organización en cualquier parte del mundo. Se necesita un espacio, facilitadores y materiales sencillos, ya que son las propias personas con discapacidad las que atienden sus necesidades y realizan las adaptaciones de los textos de forma que puedan ser entendidos por todos.